En la batalla entre el PVC y el Aluminio para las instalaciones de ventanas, ambos materiales ofrecen una durabilidad impresionante. La elección depende en última instancia de sus necesidades específicas y del clima en el que resida. El PVC destaca en áreas propensas a la humedad y requiere menos mantenimiento, lo que lo convierte en la elección principal para muchos propietarios. El Aluminio, con su fortaleza y resistencia a las temperaturas extremas, es ideal para otras aplicaciones.
